¿Has Sido Discriminada? Aprovecha tu Experiencia Para Lanzar tu Marca
No importa lo adelantada que consideremos a nuestra sociedad o cómo las historias sobre tolerancia e igualdad parecen liderar siempre las noticias del día. Seamos claras: la discriminación existe. Y afecta especialmente a las mujeres y, en mayor medida, a las mujeres multiculturales. En muchas ocasiones, ese doble golpe, por así decirlo, ser mujer y pertenecer a una minoría racial, puede parecer una batalla perdida que continúa repitiéndose y no parece acabar nunca. También puede dar la sensación de que, tanto da cuánto trabajemos o cuánto nos esforcemos, nunca alcanzaremos ese exagerado “estándar de excelencia” dictado por el hombre blanco.
Ten Esto Claro: el Dolor de tu Discriminación es la Llave de tu Éxito
Del significado de este titular es de lo que Nely Galán habla en su libro, ¡ADELANTE!. “Tu dolor es tu marca”, comenta, haciendo hincapié en que, si tienes un problema particular, las probabilidades de que no seas la única son cuantiosas: y así es cómo descubres tu mercado demográfico ideal. No hay duda: tu dolor puede causar heridas (y esa es precisamente la naturaleza del dolor), pero cuando lo analizas de esta forma, tu dolor también se puede convertir en el vehículo perfecto para que tu negocio prospere.
“Pienso que el dolor es la puerta al crecimiento. Aunque a veces tratemos de esconder ese dolor, borrarlo o mantenerlo alejado de nuestros hijos, el dolor es algo con lo que debemos mantener una relación. Cuando llega, es terrible; eso lo sabemos. Pero es importante tener presente que algo maravilloso puede surgir de él”, escribe Nely.
Dolor + Pasión = Beneficio
Un caso bien claro: la chef de 25 años Chloe St-Cyr, quien, a pesar de haber trabajado en restaurantes de lujo en Quebec, cocinado en Dubai al lado de chefs galardonados con cinco estrellas Michelin, ganar el concurso Taste New Zealand (Sabor de Nueva Zelanda) en 2015 y lograr la tercera posición en la competición Chef Joven del Año por parte de Salon Culinaire en los Emiratos Unidos, aún se sintió, según Fast Company, “como si siempre colisionara contra el comportamiento sexista sistemático tan prevalente en la industria culinaria”. La chef de 25 años asegura que la gente piensa que la halagan cuando le dicen que trabaja como un hombre o que es casi imposible encontrar una chaqueta de chef que se ajuste a sus pechos.
¿Y qué hizo al respecto? Convirtió esa frustración en una compañía, MiumMium, un mercado comunitario donde se pueden contratar chefs privados. A través de su plataforma, los consumidores pueden contratar chefs para que cocinen en sus hogares o en eventos privados, como cenas u ocasiones especiales. Los chefs, cuando son contratados, nunca son cuestionados si son hombres o mujeres, lo que además protege a aquellos que forman parte de la comunidad LGBT de sufrir discriminación alguna.
Luego también está la historia de la diseñadora camboyana con sobrepeso Theary Kim, quien creció en Oregón, donde siempre se sintió discriminada porque las compañías de diseño de ropa nunca creaban piezas para chicas de su tamaño. Hoy en día, Theary es la Directora Ejecutiva (CEO) y fundadora de una línea de ropa de tamaño plus llamada Youtheary Khmer. Ella plantó cara al dolor que sintió por no sentirse aceptada y lo transformó, no solo en un negocio, sino también en una opción creativa donde pudo prosperar.
Y no nos olvidemos de la compañía europea Afrostream, que, de acuerdo con TechCrunch, es una plataforma similar a Netflix que ofrece exclusivamente contenido africano y africano-americano. Su fundador, Tonjé Bakang T., siempre sintió que, cuando crecía, no tenía suficientes modelos a seguir.
Todas estas personas transformaron el dolor en negocio al concentrarse en la idea de que el dolor de su discriminación también fue la semilla de su éxito. Al explorar el corazón de su identidad, lo bueno, lo feo y lo malo, pudieron posicionarse para avanzar en sus vidas… de una vez por todas. Tal y como dijo el magnate de la música Jay Z, “la identidad es una prisión de la que nunca puedes escapar. Pero una forma de redimir tu pasado no es huir de él, sino entenderlo y usarlo como la base de tu crecimiento”.